Sitios Arqueológicos en Lima

Sitios Arqueológicos en Lima

Destinos Arqueológicos en PerúEn los valles de Lima, y otros cercanos, se desarrollaron diversas culturas preincaicas y luego fue dominio de los Incas, quienes desarrollaron importantes centros urbanos y religiosos, que hoy se pueden visitar como Pachacámac, Puruchuco, Cajamarquilla, Huaca Pucllana, entre otros.

A diferencia de los edificios coloniales, los principales restos arqueológicos prehispánicos de Lima se encuentran, como es lógico, fuera del Centro Histórico de la ciudad, en distritos residenciales o bien en valles de la costa relativamente próximos a la gran metrópoli.

En 1996 se redescubrió la ciudad Sagrada de Caral, habiendo transformado la historia, ya que es un sitio arqueológico de 5000 años de antigüedad, sus orígenes se remontan al periodo arcaico tardío de los Andes Centrales y hacen de él el centro de civilización más antiguo de las Américas.

Caral

La ciudad sagrada de Caral cambió la historia del Perú y el mundo al mostrar que en los Andes Centrales se formó una civilización con una antigüedad comparable a las del Viejo Continente: Mesopotamia, Egipto, India y China. A diferencia de éstas, que interactuaron entre sí, y con ello enriquecieron sus respectivos procesos culturales, la sociedad de Supe no tuvo contacto con otras civilizaciones del Viejo Continente ni del Nuevo, pues se adelantó en por lo menos, 1500 años a la sociedad Olmeca, reconocida como el otro foco civilizatorio de América. Hace 5000 años gran parte del territorio peruano estuvo habitado por sociedades sedentarias con agricultura incipiente, pero sólo en el área norcentral del Perú confluyeron condiciones económicas, sociales, culturales y naturales para el precoz desarrollo de la civilización andina.
Dra. Ruth Shady Solís

Declarado como Patrimonio Cultural de la Humanidad por UNESCO en 2009.

Caral, la ciudad más antigua de América, es un sitio arqueológico de 5000 años de antigüedad que abarca 66 hectáreas. Está emplazado en una meseta desértica y árida que domina el valle fértil del río Supe. Sus orígenes se remontan al periodo arcaico tardío de los Andes Centrales y hacen de él el centro de civilización más antiguo de las Américas. La ciudad, excepcionalmente bien preservada, es impresionante por la concepción y complejidad de sus elementos arquitectónicos y espaciales, sobre todo las plataformas monumentales de piedra y tierra y los patios circulares bajos.

Caral es uno de los 19 asentamientos urbanos de la región y su arquitectura, compleja y monumental a la vez, comprende seis grandes estructuras piramidales. El hallazgo de un quipu (pieza textil de cuerdas con varios nudos y colores, anudado a otros ramales similares y que se utiliza para registrar y transmitir relatos, noticias y cuentas) atestigua el grado de desarrollo y complejidad alcanzado por la civilización de Caral. El plano de la ciudad y algunos de sus componentes –en particular, las estructuras piramidales y el conjunto residencial de la clase dominante– atestiguan claramente la existencia de funciones ceremoniales reveladoras de una fuerte ideología religiosa.

La Ciudad Sagrada de Caral se encuentra en Supe, en la provincia de Barranca, al norte de Lima, a la altura del kilómetro 184 de la carretera Panamericana Norte, en el Área Norcentral del Perú.

Acceso vía terrestre: desde Lima por la Panamericana Norte hasta el kilómetro 184 y seguir el desvío al este de 23 Km hasta Caral. Horario de Visitas: Diario de 9 am. a 4 pm.


Pachacámac

El oráculo de Pachacámac
A 31 Km al sur de Lima por la autopista Panamericana Sur, denominado el fértil valle del río Lurín, se levanta un antiguo oráculo precolombino: Pachacámac, el afamado centro ceremonial que tanto impacto causó a los conquistadores españoles, y sin duda alguna a los propios Incas al llegar a la costa.

Construido enteramente con ladrillos de barro (adobe), era considerado, junto con el Cusco, el principal lugar de culto en el Perú prehispánico. Hasta este lugar llegaban peregrinos de los lugares más distantes para rendir tributo a dios Pachacámac, creador del mundo y de sus criaturas. La parte inca del complejo arqueológico (1440-1533) es la mejor conservada. El sitio arqueológico exhibe palacios, plazas y templos cuidadosamente restaurados y cuenta con un Museo de Sitio que alberga una interesante colección de piezas. Pachacámac fue un centro religioso de categoría panregional cuyos orígenes aún no son bien conocidos. Parece haberse constituido en un centro de poder importante hacia los inicios del periodo Intermedio Temprano. El descubrimiento de un templo de dicho periodo, cuya fachada estaba pintada de rojo, hoy conocido como el Templo Viejo, fue obra del célebre arqueólogo Alemán Max Uhle. Sus hallazgos, especialmente cerámica y textiles, exhiben diseños serranos, en muchos casos de indudable inspiración altiplánica. De un tiempo posterior, quizá de fines del Horizonte Medio (siglo IX al X DC.), dataría otro templo que ha sido bautizado como Templo Pintado, debido a los restos de pintura murales hallados en él.

Durante los siglos XI al XV D.C., la actividad constructiva se incrementó, y con ello el poder de la ideología vinculada a los dioses venerados en el sitio. Es la época de la construcción de los templos-palacios que recuerdan a los zigurats del Cercano y Medio Oriente, conocidos como “templos provinciales”, fruto del afán de comunidades diversas de la costa central por legitimar su pertenencia a un culto de sorprendente prestigio. La convivencia de templos de distintos periodos provenientes de áreas costeñas refuerzan la idea de que Pachacámac fue un oráculo (los cronistas europeos del siglo XVI indican que la deidad suprema fue Ichma, asociada a los poderes telúricos). Cuando los Incas se establecieron en la costa central, reconocieron su poder y lo mantuvieron vigente como parte de su política expansionista, pero también edificaron un nuevo santuario sobre la cima de un promontorio rocoso: el imponente Templo del Sol. Hoy, desde él se puede observar todo el centro ceremonial hacia el este y el océano Pacífico hacia el oeste, así como dos islas que integran la tradición oral de Lurín desde épocas prehispánicas. Visto en conjunto, Pachacámac representa uno de los focos más importantes dentro del largo complejo y dinámico proceso de integración regional andina.

La majestuosidad de las altas pirámides truncas, palacios, templos y plazas que se ubican en el lugar nos transmiten la jerarquía política, cultural y religiosa que tuvo Pachacámac. Fue durante la época preinca e inca el oráculo más importante de la costa peruana al cual acudían en peregrinaje miles de habitantes provenientes de los lugares más alejados del Perú antiguo. El dios Pachacámac, original de la costa central, sobrevivió a la influencia inca y española. Según la mitología inca, fue dios del fuego e hijo del Sol, rejuvenecedor del mundo, en pocas palabras el hacedor del mundo y de todas las criaturas que habitan en él. Las primeras ocupaciones en la zona datan del año 200 a.C. pero la construcción del santuario se inicia con el florecimiento de la cultura Lima (1300 d.C. a 1400 d.C.), con el Templo de Urpiwachak al oeste de la zona y el Conjunto de Adobitos, grandes edificaciones de compleja técnica arquitectónica. La cultura Ichma desarrolló, 400 años antes del establecimiento de los Inca, el gran centro ceremonial: calles, numerosos templos con rampas y el Templo Pintado son muestra de su urbanismo religioso. Los Incas, al llegar al valle, adecuaron las construcciones preexistentes a sus necesidades administrativas, desacralizando la ciudad y perdiendo el oráculo del centro. Construyeron el Templo del Sol, el Acllahuasi, la Plaza de los Peregrinos y otros palacios cuya cuidadosa reconstrucción permite imaginar el lugar quinientos años atrás. El santuario de Pachacámac es hoy un complejo arqueológico que cuenta con museo de sitio donde se aprecian objetos de las culturas Wari, Lima, Ichma e Inca, entre los que resalta el ídolo de Madera que representa a Pachacámac.

Huaca Huallamarca

En el distrito de San Isidro se encuentra un importante conjunto arqueológico, aunque más pequeño: Huallamarca o Pan de Azúcar, una pirámide escalonada hecha de adobes con una impresionante rampa de acceso. Las tumbas del la huaca Huallamarca comprende un increíble lapso que va desde el siglo III D.C hasta el advenimiento de los Incas en el siglo XV. Al parecer, Huallamarca fue un centro ceremonial cuyo uso estaba tal vez restringido a una elite sacerdotal, ya que los pisos descubiertos presentan poco desgaste. Una larga secuencia de usos y abandonados de este centro revela cómo las costumbres funerarias fueron cambiando. Durante el periodo Intermedio Temprano los difuntos fueron enterrados boca arriba, extendidos sobre literas de cañas. Hacia el siglo VI D.C. los muertos eran colocados en forma flexionada, en posición fetal y envueltos con telas finas. Así, durante las últimas etapas del Horizonte Medio (épocas 3 y 4) los individuos fueron envueltos en fardos acompañados de una falsa cabeza, una suerte de máscaras hecha de tela o madera con pintura

Ubicación:  Av. Nicolás de Ribera N° 201, San Isidro.

Huaca Pucllana o Juliana

La huaca Pucllana está situada en medio del moderno distrito de Miraflores y ocupa una superficie de alrededor de 5 Ha. Esta huaca fungía de centro administrativo y ceremonial para los habitantes del valle del Rímac, durante el periodo Intermedio Temprano y los inicios del Horizonte Medio (siglo V- VIII D.C). El edificio mayor del Pucllana, de 500 metros de largo, mas de 100 metros de ancho y 22 metros de altura, es una pirámide trunca maciza, construida íntegramente sobre la base de relleno de tierra y adobes pequeños. Además el sitio está circundado por un conjunto de ambientes de menor tamaño pero igualmente notables: cuartos pasadizos, patios y rampas, por lo general finamente acabados con enlucidos de barro y, en algunos casos, con restos de pintura amarilla. La monumentalidad de esta antigua construcción de adobes queda fácilmente en evidencia al subir a su cima y divisar el mar y los modernos edificios que la rodean desde lo alto. Por su arquitectura y los objetos recuperados en el lugar, la función de Pucllana debió se la administración del culto y de los bienes que circulaban en el valle. Los arqueólogos han recuperado textiles, cerámica decorada con pintura de color rojo, blanco y negro, gris y naranja y restos e maíz, frejol, pallar, chirimoya, pacae, alpacas, llamas, cuyes, patos, peces y moluscos del Pacífico.

Ubicación: calle General Borgoño cuadra 8, Miraflores
Horario de Visitas: Lunes a Domingo de 9:00 a.m. a 5:00 p.m.

Puruchuco

Hecho de adobes rectangulares, el palacio residencial de Puruchuco exhibe una planta cuadrangular definida por un grueso muro de 4 metros de altura y 60 cm de ancho, así como una serie de salas, patios y corredores coherentemente articulados en su interior, unos de carácter público y otros más bien privados. El moderno museo de sitio construido en el centro en el centro arqueológico alberga valiosos objetos preincas e incas hallados en la zona, incluyendo muchos procedentes de otras partes del amplio valle del Rímac.

Subiendo hacia la sierra, al este de Lima, se halla Puruchuco, palacio de un curaca que gobernó sobre una porción de la margen izquierda del río Rímac poco antes y durante el establecimiento de los Incas en el valle.

Ubicación: 7.5 Km. al este de Lima - Carretera Central
Horario de Visitas: Martes a Domingo de 9:00 a.m. a 5:00 p.m.

Cajamarquilla

Centro de importancia regional entre los siglos VI y VIII D.C. La “ciudad muerta” de Cajamarquilla está formada por pirámides, plazas, calles, cuartos y zonas laberínticos perfectamente reconocible en medio de un paisaje árido, duramente golpeado por los aluviones en época de lluvia. Sin embargo, el sitio tuvo una vida muy compleja y dinámica, como lo atestiguan los entierros humanos en varios sectores; los objetos con decoración típica del valle y otros de la costa y la sierra sur; los numerosos silos subterráneos para almacenar víveres y alimentos; los patios para hacer chicha (cerveza de maíz) para las fiestas; y los cotidianamente. Hacia el siglo VIII D.C el sitio parece haber sido abandonado. Pero tiempo después un nuevo impulso cultural lo reactivó, y construyó nuevos edificios sobre o al lado de los antiguos, hasta configurar el aspecto desordenado que hoy prevalece.

Ubicación: 17.5 Km. al este de Lima - Carretera Central, desvío en el kilómetro 10.
Horario de Visitas: Martes a Domingo de 9:00 a.m. a 5:00 p.m.

  • Caral, la ciudad más antigua de América

    Caral, la ciudad más antigua de América

    © J. Mazzotti

  • Caral, la ciudad más antigua de América

    Caral, la ciudad más antigua de América

    © J. Mazzotti

  • Caral, la ciudad más antigua de América

    Caral, la ciudad más antigua de América

    © J. Mazzotti

  • Pachacámac

    Pachacámac

    © J. Mazzotti

  • Pachacámac

    Pachacámac

    © J. Mazzotti

  • Huaca Pucllana

    Huaca Pucllana

    © PromPeru - D. Silva

  • Huaca Pucllana

    Huaca Pucllana - Museo de Sitio

    © PromPeru - W. Silvera

  • Huaca Huallamarca - San Isidro

    Huaca Huallamarca - San Isidro

    © J. Mazzotti

  • Cajamarquilla

    Cajamarquilla

    © PromPeru - W. Hupiu